“La UdeC me ha ayudado mucho”: estudiante de Ingeniería relata su vivencia como primera astronauta análoga chilena
Crédito: Tatiana López Miranda
Tatiana López Miranda (22) es parte del equipo de 9 astronautas análogas y análogos (6 mujeres y 3 hombres) elegidos entre cientas y cientos de todo el mundo que postularon a la misión Asclepios II.
Dice que el espacio es la aventura más grande que pudo encontrar, que su familia y amigos han sido claves en sus logros, al igual que sus compañeros de carrera en Ingeniería Civil Aeroespacial y la Universidad de Concepción.
La estudiante de la UdeC, Tatiana López Miranda (22), se convirtió en la primera astronauta análoga chilena en la misión Asclepios II y en conversación con Noticias UdeC cuenta su inédita vivencia.
«Soy una astronauta para la misión Asclepios II y eso significa que seré astronauta en una misión análoga, la cual busca llevar a cabo o simular las condiciones extraterrestres o del espacio aquí en la Tierra”, detalla Tatiana.
El objetivo, explica, es lograr en los Alpes suizos, que es el lugar elegido para simular el polo sur de la Luna, la exploración o extracción de agua, bajo las mismas condiciones extremas, lo cual puede servir a futuro para ser replicado en una misión espacial.
Proceso de selección
Tatiana López es parte de la tripulación de 9 astronautas análogas y análogos (6 mujeres y 3 hombres) elegidos entre cientos de todo el mundo que postularon.
Cuenta que hubo cuatro etapas de selección, la primera donde hubo revisión de currículums y también de los argumentos que los motivaron a ser astronautas.
“Luego, nos hicieron grabarnos y hablar en inglés, que es el lenguaje oficial de la misión, y resolver algunos problemas. Por ejemplo, ¿Cómo reaccionábamos frente a situaciones de estrés? o ¿Cómo trabajábamos con nuestros compañeros?, Por ejemplo, si algo se rompía en la Luna», menciona.
En una tercera etapa, hubo preguntas de lógica, resolución de problemas y memorización, además del aprendizaje de los detalles de la misión, como los experimentos que deberían realizar, para familiarizarse con la especial tarea.
«La última etapa fue cuando viajé a Suiza y ahí llegamos 18 finalistas, que veníamos de todo el mundo, a quienes nos hicieron evaluaciones sicológicas y siquiátricas, incluso con especialistas de la NASA, conocedores de ambientes extremos», relata Tatiana.
“Después, hicimos más pruebas, por ejemplo, en medio de un lago armamos un puzzle debajo del agua, sin nada de apoyo, eran piezas de madera, que tenían que mantenerse bajo el agua”, añade.
Rescata además que en esa etapa pudo conocer a Claude Nicollier, el primer astronauta suizo y primer comandante de la Estación Espacial Internacional. “Tuvimos una entrevista muy entretenida», apunta.
Así completó todo el proceso y finalmente, Tatiana López, fue una de las elegidas.
UdeC fue clave
En noviembre comienza el entrenamiento con sus compañeros, guiados desde Suiza. Luego, en febrero, comienza el entrenamiento presencial en suelo europeo, el cual se corona con el inicio de la misión en julio, la cual se extenderá entre 7 y 10 días.
«La idea es que alguna vez (resultados de su misión) puedan ser utilizados en el espacio, igual que el entrenamiento que vamos a hacer nos sirva para algún día ir al espacio. Si bien somos astronautas análogos, esto nos permite tener entrenamiento para algún día poder ir al espacio», agrega.
«En Chile no hay muchas oportunidades con algo así, es algo que me llena de alegría y que no termino de creer. Ha sido tan rápido, al final tengo suerte de lo que me está pasando», describe.
Finalmente, Tatiana López reconoce en la UdeC un apoyo esencial para ser una de las elegidas.
«La Universidad me ha ayudado mucho. La manera en que la UdeC nos enseña a enfrentar los problemas, por ejemplo, con los grupos de interés que hay, de tener las manos en la masa, de poder diseñar, construir y lanzar un cohete, son cosas prácticas que me ayudaron mucho en el proceso, porque, al final, ellos querían saber si puedo hacer cosas», afirma.
En esa línea, cuando la alumna confirmó que había sido seleccionada, agradeció el apoyo del Decano de la Facultad de Ingeniería, Luis Morán, y de la UdeC.
«La cercanía de poder trabajar con tus pares. He trabajado con gente mayor en la propulsión de cohetes y es una instancia para guiarnos y trabajar en equipo, que es una de las características principales que se buscan en los astronautas», finaliza.
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