Trastorno afectivo estacional: Psicóloga UdeC explica qué es y cómo afrontarlo durante los meses de invierno
Crédito: Esteban Paredes Drake
La profesional de la Unidad de Apoyo Psicosocial al Personal de la Universidad de Concepción, Nerkis Fuentes Domínguez, detalló que la ansiedad, la pérdida del disfrute de la vida y problemas para conciliar el sueño son algunos de los síntomas.
Puede ser por la falta de luz solar, por algunos rasgos de la personalidad o incluso por disposiciones genéticas; en cualquier caso, el trastorno afectivo estacional -también conocido como depresión estacional- es un fenómeno que se registra con frecuencia durante los meses de otoño e invierno y predispone a las personas a un estado de ánimo aletargado, deprimido, ansioso entre otros síntomas.
La Psicóloga de la Unidad de Apoyo Psicosocial al Personal de la Universidad de Concepción (UAPPU), Nerkis Fuentes Domínguez, explicó que “este trastorno afectivo sigue un patrón psíquico estacional; esto significa que se alterna en una remisión total de los síntomas depresivos en la época de verano y primavera; es decir, los síntomas depresivos se presentan sólo en los meses de otoño e invierno. El resto de las estaciones se cursa de manera asintomática”.
La profesional detalló que este trastorno suele caracterizarse por un estado de ánimo que se describe como deprimido, donde se presenta en la persona una disminución importante del interés del placer -lo que se conoce como anhedonia- y también se reconoce como la dificultad de experimentar disfrute en la vida. “También se presenta tristeza, desánimo, la persona experimenta también ansiedad, irritabilidad o astenia, dificultad para concentrarse y también se caracteriza por el aumento de peso, el aumento del deseo de comer y de antojos por comida chatarra”, detalló.
Sobre las causas, la psicóloga explicó que la teoría lo describe como un fenómeno multifactorial. “Se sabe que puede ser por distintos factores ambientales; dígase el clima o la latitud del planeta donde nos encontremos; factores culturales, genéticos y también los rasgos de personalidad tienden a predisponer a este trastorno”, dijo.
Mejorar la calidad de vida
Para sobrellevar este cuadro, la principal recomendación es iniciar un proceso de ayuda terapéutica, la que permitirá a la persona modificar aquellos pensamientos desadaptativos que generan ansiedad y depresión.
“La terapia se enfoca en la modificación de pensamientos poco ajustados o desadaptativos que generan los síntomas de ansiedad y depresión y que pueden alterar el comportamiento. Por lo tanto, la terapia proporciona una toma de conciencia, incorporación de cogniciones o pensamientos, ideas, esquemas cognitivos más adaptativos y ajustados a la realidad que mejoran la adaptación del individuo al medio”, detalló.
Junto con ello, otra recomendación transversal -porque sirve tanto para el trastorno depresivo estacional como para otros cuadros- es realizar deporte, exponerse al sol y mantener una dieta equilibrada.
“El ejercicio físico nos ayuda a liberar el estrés, la ansiedad y libera serotonina, la hormona que nos ayuda con el equilibrio del estado de ánimo. También, al aumentar el flujo sanguíneo, el cerebro libera más endorfinas que son antidepresivos naturales”, recomendó.
También dijo que se recomienda salir a caminar a lugares cercanos, parques “o simplemente sentarse en un banco, en un lugar verde y asolearnos un rato; recibir esa luz, aunque el día esté nublado, ayuda”. Esto último, dijo, es ideal realizarlo dentro de las dos horas posteriores a levantarse para obtener mejores resultados.
Sobre la dieta, Nerkis dijo que es importante mantener un en equilibrio nuestra microbiota, ya que si esta se altera, tendremos como resultado un desbalance en la producción de serotonina y eso repercute en el estado de ánimo. “Para reducir la sintomatología de un cuadro depresivo es importante regular el comportamiento alimentario”, finalizó.
- Compartir
- Compartir
Noticias relacionadas
Reportajes