Facultad de Educación adquirió robots y kits de trabajo para investigar en inteligencia artificial

Un conjunto de materiales, kits de robótica, realidad virtual e inteligencia artificial fue adquirido por el Departamento de Metodología de la Investigación e Informática, con el objetivo de generar investigación y uso en estudios de pre y postgrado.

El doctor Pedro Salcedo Lagos, quien está a cargo de distintas asignaturas relacionadas con la materia y trabaja en el diseño del Doctorado en Inteligencia Artificial, señaló que, entre otras materias, se podrá proyectar “una serie de investigaciones que serán relevantes para abrir nuevas líneas de trabajo. Por ejemplo, se está preparando un proyecto de investigación sobre Robótica y Realidad Virtual en el entrenamiento de habilidades sociales para niños con autismo y alumnos tesistas están trabajando en cómo trabajar con realidad virtual en la enseñanza de matemáticas”.

En concreto, se trató de la adquisición de materiales entre los que se cuentan dos robots humanoides, uno que representa a un perro y varios kits de robótica, de casas inteligentes, lentes de realidad virtual y dos impresoras 3D.

El robot más llamativo se llama EVA está orientado a aplicaciones en educación, emociones y salud. Este robot puede identificar mediante la lectura de la comunicación no verbal y verbal, las emociones que expresa una persona. “EVA tiene la posibilidad de reconocer emociones como la alegría y la tristeza. Sanemos que las emociones son un gatillador principal de los aprendizajes y con este robot podríamos trabajar para la mejora de las habilidades sociales. Nuestra hipótesis en este caso es que esta tecnología podría ayudar a mejorar competencias emocionales de niños con autismo, para lo que estamos trabajando con profesionales de la psicología”.

El robot humanoide más pequeño, llamado Renato, puede programarse para realizar distintas funciones y los motores visibles. Con él se espera enseñar lenguaje de programación (Scratch) a los y las futuras docentes para que a su vez se lo enseñen a sus estudiantes.

Otra línea de trabajo se desarrollará con las impresoras 3D. “En tercero y cuarto medio se usan estas impresoras para el aprendizaje de la Geometría. Aquí, el alumno tiene que aprender a visualizar un cuerpo 3D y desarrollarlo en la impresora”. También se utilizarán en un curso de Inteligencia Artificial y otro de Robótica que se les está impartiendo a las y los alumnos de pedagogía.

Enseñanza ética

Otro de los elementos que Salcedo señala como relevantes a la hora de trabajar con niños y nuevas tecnologías, es que estos aprendan a distinguir lo que es creado artificialmente de los organismos vivos, así como contar con herramientas que les permitan identificar cuando algún contenido es falso. “Es importante que las personas aprendan a usar estas herramientas sin dañarse ni dañar a otros y eso se transmite desde la escuela. A nivel de postgrado, también nos compete investigar cómo hacer para que los niños saquen el máximo de provecho dentro de los límites éticos. Asimismo, en la construcción de estas tecnologías, por parte de los investigadores también hay una responsabilidad, alguien que no está preparado para comprender las implicancias que esto tiene no debería poder construir una tecnología inteligente”.