Resiliencia y compromiso para fortalecer a toda una comunidad
Crédito: Equipo Campaña Carlos Saavedra Rubilar
El aporte de cada integrante de la comunidad UdeC ha permitido mantener el norte, pensando siempre en la estabilidad institucional, el bienestar de las personas y el compromiso de nuestra Universidad con la sociedad y sus territorios. Es de esperar que vengan tiempos menos turbulentos, pero en el caso que no fuese así, nuestro equipo está preparado para afrontar los desafíos futuros, porque ya hemos hecho frente a múltiples crisis, y de todas ellas hemos salido fortalecidas y fortalecidos.
Durante estos cuatro últimos años, nuestra administración enfrentó, desde el primer día de asumidas sus funciones, profundas crisis que afectaron no solo a la institución, sino al país y, en algunos casos, al mundo entero. No obstante, cada una de las dificultades fue abordada como una oportunidad para avanzar en temáticas que requerían, con urgencia, ser atendidas. Asimismo, todas estas dificultades nos alentaron a buscar en conjunto soluciones que fueran en beneficio tanto de la comunidad universitaria como de la ciudadanía de las regiones de Biobío y Ñuble, y de todo el país.
Así, por ejemplo, en medio del movimiento feminista de 2018, se concretó la instalación de la Dirección de Equidad de Género y Diversidad (DEGyD), cuyo sostenido trabajo no solo posibilitó la definición y elaboración de protocolos específicos, el apoyo psicológico y legal a quienes lo requirieran, desarrollo de investigaciones en casos de acoso mediante una fiscalía especializada, cursos y charlas de capacitación, entre otras múltiples medidas, sino que también la gestión de esta Dirección ha sido modelo para otras instituciones universitarias que posteriormente han seguido los pasos de la UdeC en la implementación de unidades para establecer políticas y acciones en torno a problemáticas asociadas con equidad de género y diversidad.
En octubre de 2019, abordamos el denominado estallido social protegiendo, en primer lugar, la integridad física y psicológica de todas las personas que son parte de nuestra Universidad de Concepción. Promovimos los diálogos ciudadanos y apoyamos la realización de múltiples cabildos universitarios en los que participaron integrantes de la comunidad interna y externa. Desarrollamos y pusimos a disposición de la comunidad material de apoyo que facilitara las discusiones respecto de nuestra realidad social. Junto con ello, respaldamos el trabajo desarrollado por oficinas de acompañamiento y asesorías legales que orientaron a las personas ante los abusos de fuerza que se cometieron en dicho contexto. En este periodo también, dimos los primeros pasos para realizar docencia en modalidad virtual, lo que nos permitió llegar mejor preparados para enfrentar de manera óptima la docencia de pre y postgrado en pandemia. No podemos olvidar que el trabajo desarrollado en medio de esta compleja crisis derivó en el establecimiento de un salario mínimo UdeC, la disminución en los salarios de la plana directiva mayor, la creación de la Mesa de Trabajo Institucional que discutió un conjunto importante de reivindicaciones del personal universitario y la creación del Programa Foro Constituyente que ha hecho un notable aporte a la discusión y promoción del proceso constituyente del país.
A partir de marzo de 2020, el país y el mundo debió enfrentar los efectos de la pandemia provocada por el coronavirus. Enfrentados a este nuevo desafío, migramos todas las actividades académicas de la Universidad de Concepción hacia plataformas virtuales con el fin de cuidar la salud de las personas que integran nuestra Casa de Estudios, sin descuidar la naturaleza educativa por la cual nació hace más de 100 años nuestra institución. Debimos realizar un enorme esfuerzo institucional para mantener la sostenibilidad financiera y los puestos de trabajo en un escenario en extremo difícil. Aun así, seguimos creciendo y apoyando la ejecución de todos los proyectos, cuyo propósito fue ayudar a enfrentar esta pandemia, con lo cual el principio de cuidar el bienestar de las personas siempre estuvo en el horizonte de nuestra gestión universitaria.
Todo esto ha sido posible con el compromiso de cada persona que integra esta Universidad, así como con los liderazgos de cada unidad universitaria. El aporte de cada integrante de la comunidad UdeC ha permitido mantener el norte, pensando siempre en la estabilidad institucional, el bienestar de las personas y el compromiso de nuestra Universidad con la sociedad y sus territorios. Es de esperar que vengan tiempos menos turbulentos, pero en el caso que no fuese así, nuestro equipo está preparado para afrontar los desafíos futuros, porque ya hemos hecho frente a múltiples crisis, y de todas ellas hemos salido fortalecidas y fortalecidos.
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