Ópera “Llacolén” deslumbra al público en su debut en el Teatro Universidad de Concepción

Una propuesta escénica cargada de simbolismo, identidad y raíces territoriales fue la que presentó este miércoles 11 de junio la ópera «Llacolén» en su estreno mundial en el Teatro Universidad de Concepción ante un público que llenó la sala y aplaudió esta creación original, que integró un trabajo colaborativo de alto nivel.

La obra fue compuesta y dirigida por Víctor Hugo Toro Valencia, con dramaturgia de Gonzalo Cuadra Balagna, dirección escénica de Pablo Maritano y bajo la producción de la Corporación Cultural Universidad de Concepción (Corcudec).

Con la experiencia artística del Coro y la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Concepción, la ópera—escrita en español y mapudungún— narró el drama de Llacolén, hija del lonko Galvarino, quien se enamora de un capitán español en plena guerra de Arauco. El conflicto entre el amor y la lealtad, la tensión cultural y el desenlace trágico, fue llevado al escenario con una propuesta escénica innovadora que fusionó proyecciones visuales, música y diseño escenográfico. 

“Siento sinceramente que estamos haciendo historia”, expresó emocionado Víctor Hugo Toro. “Pocas veces ha sucedido que un compositor tenga todas las condiciones, una gran orquesta, un coro, solistas, una escena y grandes artistas detrás de su idea, detrás de la imaginación que tuvo de componer una ópera. Además, una ópera que solamente podía estrenarse aquí en Concepción, a pocos kilómetros de donde dice la leyenda que la historia de Llacolén sucedió”, agregó el director. 

Por su parte, el destacado músico, investigador y divulgador del género lírico en Chile, Gonzalo Cuadra asumió el desafío de escribir el libreto de «Llacolén», una obra que, según sus palabras, es “una ópera nueva, pero arraigada en las tradiciones chilenas”. 

La obra se construyó a partir del diálogo intercultural. En ese proceso fue clave la colaboración de la lingüista y académica de la Universidad de La Frontera, Jaqueline Caniguan Caniguan, quien aportó desde su conocimiento del mapudungún y la cosmovisión mapuche, guiando al equipo en la incorporación de símbolos, conceptos y estructuras culturales propias del pueblo originario.

Para Cuadra, el proceso creativo fue de largo aliento e implicó una profunda investigación histórica y literaria. “Fue adentrarse en la cultura mapuche, en la cultura española del siglo XVI, para eso siempre estaré infinitamente agradecido de la académica Jacqueline Caniguan, que me aportó con una visión etnológica, simbólica, aspectos psicológicos, que le dieron cierta verosimilitud, cierto rigor histórico, pero también cierta fantasía. No hay que olvidar que esto es un espectáculo que tiene que llamar a la razón, pero a través de la fantasía”, detalló. 

Un espacio para disfrutar

El Director Ejecutivo de la Corporación Cultural Universidad de Concepción, Eduardo Díaz Rodríguez, señaló que “Llacolén” representa un verdadero regalo al patrimonio y a la identidad regional. “Nos hicimos cargo convocando a diferentes actores con una amplia experiencia en la producción lírica, tanto a nivel internacional como nacional. Pero nos interesaba también buscar la participación de diferentes artistas de acá de la región que tuviesen su primera aproximación a la producción lírica. Y es así que se crea este equipo multifacético, que viene de diferentes áreas del conocimiento, de las artes”, manifestó. 

Trabajo que incluyó elementos claves como Mapping, diseño escenográfico y trabajo de luces.

Para la académica de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía UdeC, Marianela Camaño Saavedra, diseñadora escénica de la ópera “Llacolén” , este trabajo representó una oportunidad única de conjugar múltiples lenguajes artísticos en una experiencia inmersiva. “Pocas veces tenemos la oportunidad de presentarnos frente a una obra que está articulando la música, un texto, una historia, pero además actuación, danza, en este caso el imaginario desde lo visual. Entonces, pienso que la ópera en sí, como obra de arte, es muy inmersiva. Y esta más aún, porque como estamos trabajando también con nuevos medios, proporciona esa fantasía”, detalló. 

La propuesta, de profunda pertinencia territorial, fue estrenada en Concepción, marcando un hito no solo por su calidad artística, sino también por su origen y contexto.

Una obra aplaudida por el público 

El estreno de “Llacolén” no solo marcó un hito desde el punto de vista artístico y territorial, sino que también provocó una profunda conexión con el público que llegó hasta el Teatro Universidad de Concepción. 

Una de las asistentes al estreno fue Gloria Voglio Vaillant, quien relevó la presentación inédita en el país. “Me llevo un recuerdo de la primera vez que se estrenó algo tan maravilloso. Felicitar de todas maneras al director y a todas las personas que trabajaron porque realmente fue una cosa maravillosa, muy emocionante, muy linda”, describió.

Otro de los asistentes fue Fernando Neira Carrasco, quien valoró la oportunidad de presenciar una experiencia que lo mantuvo “al filo del asiento”. “Me pareció súper genial haber podido asistir a un estreno único, mundial, de la primera función. Algo hecho aquí, localmente. Ya habíamos visto al director en otras presentaciones, pero esto fue distinto”, detalló.

Su acompañante Fernanda Alarcón también tuvo elogios para la presentación. “Sobrecogedor, creo yo. Encuentro que es una forma muy bonita de retratar la historia, muy dramática” expresó. 

Finalmente el director y compositor Víctor Hugo Toro, relevó que “es fundamental que se estén haciendo cosas en un país que es tan centralista como el nuestro, que a veces parece que todo sucede en Santiago, que el estreno de una ópera se haga en regiones, seguro no es la primera, pero debe ser un camino también y ojalá que se haga mucho más. Ojalá que después “Llacolén” se muestre en otros teatros nacionales e internacionales, que tenga una vida hermosa, como la obra de arte hermosa que es”, finalizó.