Embajada de Italia reconoce a cofundador de Centro EULA por aporte al área ambiental
Crédito: Facultad de Ciencias Ambientales
El Dr. Oscar Parra, destacado científico y profesor emérito UdeC, será homenajeado por la embajada de Italia por su contribución al ámbito ambiental en Chile. Fundador del Centro EULA, su trabajo multidisciplinario en la Cuenca del Biobío inició en 1987 y sentó las bases para la investigación ambiental en la Universidad de Concepción.
El docente, profesor emérito de la Universidad de Concepción e investigador de primer nivel en el área de la ficología, Dr. Óscar Parra Barrientos, será homenajeado por la embajada de Italia el 28 de noviembre, por su aporte al ámbito ambiental en nuestro país, su profundo conocimiento de las algas de aguas continentales y su participación en una serie de cargos de responsabilidad institucional, principalmente en la creación y liderazgo del Centro EULA Chile.
El Dr. Parra recibirá el reconocimiento de parte de la misión diplomática por la ejecución en un principio del Proyecto EULA y posterior instalación en la UdeC, que se desarrolló gracias a la cooperación italiana con Chile. El centro se convirtió en el primer núcleo interdisciplinario de investigación ambiental instalado en una universidad chilena.
Cómo se gestó el Centro EULA
Es un sábado de 1987 y un hombre lee el diario El Sur en la tranquilidad de su casa, cuando un artículo acapara su atención. Óscar Parra se entera de que una empresa española, Endesa, proyecta construir centrales hidroeléctricas en el Alto Bíobío.
El entonces profesor del Departamento de Botánica de la Facultad de Ciencias Naturales y Oceanográficas, recién llegado de un doctorado en Alemania con una formación ambiental, no puede creer la noticia. ¿Centrales hidroeléctricas que no indicaban ningún estudio? ¿Qué significado ambiental podía tener esto para el funcionamiento de la cuenca del río Biobío? El profesor sabe que la cuenca alimenta con agua a gran parte de la población de la región. Sabe también que no hay estudios que avalen la construcción de una hidroeléctrica.
Tras un sinfín de reuniones con diversas autoridades, tanto universitarias como políticas, para exigir a la empresa estudios, una delegación del gobierno italiano —de gira por Latinoamérica—, arriba a Concepción. “El gobierno italiano, con varias universidades, tenía un interés en desarrollar un proyecto de investigación y colaboración universitaria entre las universidades italianas y algún país latinoamericano. Yo era en ese entonces un representante de Naciones Unidas y esta delegación me dice que van a venir a la ciudad, a visitar la universidad, a conversar conmigo, y les indico sobre la idea de desarrollar un proyecto de investigación de carácter multidisciplinario que estudie la Cuenca del Biobío. La Comunidad Europea tenía experiencia en este tipo de proyectos, como con la cuenca del Mediterráneo, y así comienza a desarrollarse el proyecto EULA”, señaló el Dr. Oscar Parra.
El proyecto comenzó en 1987 y, en un inicio, se proyectaba solo por tres años. El proyecto contaba con cooperación entre facultades, inédito en ese entonces en el campus, para estudiar la Cuenca del río Biobío en forma integrada. “El Golfo de Arauco, que era el área costera marina más productiva del país en términos de producción íctica, era influenciado por los aportes de la Cuenca del Río Biobío. Entonces, modificar el comportamiento de los caudales, de la concentración de nutrientes del río, podía generar problemas en la zona costera. Hablábamos de que la Cuenca del Río Biobío y el Golfo de Arauco constituían una sola unidad ambiental, entonces modificar los caudales de la cuenca construyendo embalses, modificaba su comportamiento y, a lo largo del año, eso iba a repercutir. Tenía que estudiarse”, añade el Dr. Parra.
En 1990 se constituyó el Centro de Ciencias Ambientales EULA Chile, del que fue director durante 20 años. “La región requería la conformación de grupos de investigación de carácter multidisciplinario. Porque eran sistemas complejos, en donde había que, indudablemente, conformar equipos para poder entender la problemática”, son sus palabras.
Para formar equipos también había que preparar profesionales en la temática. El actual Decano de la Facultad de Ciencias Ambientales, Roberto Urrutia Pérez, fue su primer estudiante graduado de doctorado. “Es el referente en cuanto al desarrollo profesional de la línea de investigación que después yo seguí. Fue mi director de tesis de doctorado y después continué trabajando en una de las líneas de investigación que él había desarrollado en la Universidad, que era el estudio de los ecosistemas lacustres”, aclaró Urrutia.
“Es un hombre muy generoso, preocupado de compartir sus conocimientos, que no tuvo inconvenientes en traspasar la conducción del Centro EULA. Durante su trayectoria se le han hecho muchos reconocimientos por lo mismo. Para nosotros es un honor que la Embajada de Italia, reconozca la contribución que él ha realizado en la cooperación entre ambos países”, añadió el decano.
El actual director del Centro, Dr. Ricardo Barra Ríos, sostuvo que “hay un tremendo mérito en lo que fue desarrollar las bases para que el EULA sea lo que hoy es. Una tremenda visión. Me atrevería a decir que el proyecto EULA fue y debe ser uno de los proyectos de la cooperación italiana más exitoso a nivel mundial y eso es gracias al tesón de Oscar Parra”.
En ese sentido, el doctor Barra reflexionó: “nos formamos gracias a que el proyecto EULA contempló el acompañamiento de la investigación científica con un programa de formación de capacidades. Creo que ese es un elemento que nos tiene que hacer reflexionar de cómo procesos de cooperación internacional deben contemplar no solo la colaboración científica, sino también la formación de capacidades que puedan desarrollarse localmente después en pro de los procesos de investigación, de desarrollo e innovación para darle sostenibilidad a la cooperación”.
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