Crhiam participa en Plan maestro para la protección y gestión del sistema de humedales del Gran Concepción

La Región del Biobío avanza en su compromiso con la sostenibilidad a través del Plan Maestro de Ordenamie nto Territorial y Diseño Urbano para la Protección, Gestión y Resiliencia del Sistema Humedal Rocuant-Andalién, Vasco da Gama-Chimalfe y Paicaví-Tucapel Bajo. Este documento, que beneficia a las comunas de Hualpén, Concepción, Talcahuano y Penco, reconoce el valor ecosistémicos de estos espacios en la planificación urbana frente a la crisis climática.

El proyecto se distingue por su enfoque multidisciplinario, integrando perspectivas legales, técnicas y ambientales para abordar fenómenos territoriales complejos. El equipo, liderado por la Dra. Espinosa Rojas, incluyó expertos como la Dra. Amaya Alvez Marín (Universidad de Concepción y Crhiam), responsable del análisis jurídico-administrativo, y la Dra. Loretto Arriagada Merino (Audubon Américas), encargada de la evaluación ambiental. Además, participaron Rodrigo Castillo Jofré (UACh y Crhiam), Dagmar Von der Ahe (diseño gráfico y apoyo en diseño urbano), y el Dr. Leonardo Agurto Venegas (UACh), quien aportó en salidas a terreno y edición del informe final.

Resultado de cinco años de estudios y dos de trabajo interdisciplinario, el plan propone un cambio de paradigma: integrar los humedales como ejes estructurantes del territorio. El plan busca transformar a los humedales en estructuras esenciales para el desarrollo urbano y territorial, superando la visión tradicional de la naturaleza como recurso explotable. La Ley de Humedales Urbanos (Ley 21.202 del año 2020) proporciona el marco legal para proteger los ecosistemas en contextos urbanos, promoviendo una regulación basada en infraestructura verde antes de aplicar zonificaciones tradicionales. Según la coordinadora del proyecto y académica de la Universidad Austral de Chile (UACh), Dra. Paulina Espinosa Rojas, este enfoque redefine cómo interactúan las ciudades con su entorno natural en un contexto de crisis climática y ecológica.

“Las ciudades no han tenido una planificación asociada para que en su construcción respondan realmente a los objetivos de bienestar que supuestamente tienen. Eso se profundiza en un Estado altamente centralista, en el que la ciudad que más atrae es la capital. No se cuida ni se planifican los límites urbanos, por lo que la urbanidad se transforma en un proceso sin fin. La necesidad de volver a pensar en cómo interactúa la naturaleza y las ciudades, de cara a la crisis ecológica, climática y de biodiversidad nos obliga a repensar esos elementos”, puntualiza la académica.

Desafíos de Planificación y Gobernanza

El Plan Maestro destaca la capacidad de los humedales para almacenar agua y mitigar los efectos de eventos climáticos extremos. Asimismo, se articula con los Planes de Acción Regional de Cambio Climático (PARCC) y los Planes Comunales de Cambio Climático, definidos en la Ley 21.455, que establecen indicadores claros para el monitoreo y verificación de medidas. Según la Dra. Alvez Marín, estas herramientas deben integrarse en políticas públicas para enfrentar las amenazas climáticas con estrategias coordinadas a nivel regional y local.

“Este plan protege las estructuras existentes, así los humedales logran almacenar agua ante eventos extremos. Los impactos regionales del cambio climático son diversos y las vulnerabilidades también. Ello implica un trabajo de adecuación regional en materia de medidas de mitigación y adaptación al cambio climático. También supone revisar los medios de implementación con financiamiento regional. Esto supone trabajar en un plan que incluye plazos y responsables a escala subnacional”, señala la investigadora Crhiam.

El Plan Maestro contempla iniciativas específicas, como el desarrollo de un Parque Urbano en el Humedal Rocuant-Andalién en Penco, enfocado en proteger áreas de anidación de aves migratorias y promover el turismo sostenible mediante alianzas público-privadas. En Talcahuano, se proyecta otro parque urbano como medida reparadora por daños ambientales históricos y los escombros acumulados tras el terremoto de 2010.

En este contexto, esta iniciativa se consolida como un informe técnico que aspira a convertirse en política pública. Para ello, los y las expertos a cargo del proyecto enfatizan en que tanto las autoridades locales como el Gobierno Regional de Biobío y los municipios ubicados en el territorio del Humedal Rocuánt- Andalién Concepción, Penco, Talcahuano y Hualpén, deben trabajar en una política coordinada para llevar adelante las propuestas.

El informe puede ser revisado aquí