La prematurez continúa siendo uno de los principales desafíos en salud neonatal en Chile y el mundo, con cifras que bordean el 10% de los nacimientos. Todo recién nacido que llega al mundo antes de las 37 semanas de gestación, cuyo ciclo normal dura alrededor de 40 semanas, se considera prematuro, mientras que las y los bebés que nacen entre las 33 y 36 semanas se clasifican como prematuros tardíos; aquellos que lo hacen antes de las 32 semanas corresponden a prematuros de muy bajo peso; y los nacidos antes de las 28 semanas se denominan prematuros de extremo bajo peso, detalló el Director del Departamento de Pediatría de la Universidad de Concepción, Dr. Aldo Bancalari Molina.
Cada 17 de noviembre se conmemora el Día de la Prematuridad, una fecha para visibilizar la situación de los bebés nacidos antes de tiempo y la importancia de ofrecerles atención neonatal de calidad
A medida que la o el bebé es “más prematuro, o sea, nace con menos semanas de edad gestacional, el riesgo es mayor de tener complicaciones asociadas y la sobrevida es menor”, explicó la gineco-obstetra y docente de la Facultad de Medicina UdeC, Dra. María Ignacia Oyarce Maldonado, quien advirtió que la prematurez es un problema frecuente, que ha aumentado con los años.
Complicaciones de salud en bebés prematuros
“Un niño de extremo bajo peso, o sea, menor de 28 semanas de edad, tiene problemas respiratorios, hemorragias intracraneanas, infecciones, problemas de regulación de la temperatura, problemas de apnea”, detalló el Dr. Bancalari, pediatra neonatólogo. El especialista afirmó que después aparecen las complicaciones o secuelas tardías, “las dos más importantes son la retinopatía del prematuro y la displasia broncopulmonar, que es la enfermedad pulmonar crónica más frecuente del prematuro, que puede dejar secuelas a lo largo de toda la vida”.
La otra secuela importante que las y los especialistas buscan evitar es la retinopatía del prematuro. Una alteración de la retina, en que los tejidos generan fibrosis, se retraen y llegan a desprender la retina, lo que causa ceguera.
“Hay un programa en Chile, y nosotros en Concepción fuimos pioneros, fuimos los primeros que se preocuparon de pesquisar la retinopatía del prematuro”, celebró el neonatólogo.
De esta manera, y gracias al trabajo multidisciplinario, los exámenes oftalmológicos se realizan en los primeros días de vida, pudiendo entregar tratamientos efectivos lo antes posible. Hoy ese examen es hecho a nivel nacional.
“No es que, si mi bebé va a nacer prematuro, sí o sí va a tener complicaciones. No, es una ruleta. Hemos tenido guaguas que no son tan prematuras, pero igual se complican o guaguas que son muy prematuras, que no tienen ninguna complicación”, explicó la obstetra, ahondando en que su trabajo consiste en “tratar de reducir al máximo la prematurez, y cuando no podemos reducirla, tratar de llegar a la mayor cantidad de semanas (de gestación) posible”.
Con el acceso a nuevas tecnologías, a mejores cuidados neonatales, “la especialización de las UCI neonatales en nuestro país, en general, la mortalidad de los prematuros ha disminuido, pero eso a expensas del aumento de la morbilidad, es decir, aumentan las patologías que los recién nacidos puedan presentar en el período neonatal y también en su período posterior de vida”, sumó la docente de Obstetricia y Puericultura, matrona Daniela Suazo Flores
Los servicios de neonatología de los hospitales se dividen en tres áreas: cuidados intensivos, intermedios y básicos. La asignación a estas unidades depende de la cantidad de semanas de gestación que el o la bebé alcanzó y el peso con el que nació, además de las complicaciones que pueda presentar y los tratamientos necesarios.
Cuando el bebé prematuro alcanza los dos kilos, llega a “un nivel de peso bastante satisfactorio, que pueda mantenerse en la casa con cierta confiabilidad, que no vayan a tener problemas las y los niños” apreció el Dr. Bancalari.
Cuidado de prematuros al salir del hospital
En el caso de bebés prematuros extremos, son conectados/as a máquinas para avisar posibles desaturaciones o apneas del sueño, explicó la Directora de la especialidad de Perinatología para matronas y matrones, Lilian Matamala Valdez.
“Otra preocupación es el tema de las infecciones, que son muy comunes en recién nacidas/os prematuros”, estableció Matamala, quien agregó que se debe a que la alimentación no siempre es la adecuada, ya que las y los recién nacidos con esta condición se alimentan de fórmulas en su mayoría, debido a que la madre no alcanzó a madurar el proceso para generar lactancia materna.
“Los padres se los pueden llevar a la casa, este niño o niña ya no aprendió a succionar correctamente, lo puede hacer, sin lugar a duda, pero es más costoso”, detalló.
El seguimiento de la salud se realiza a través del programa de seguimiento para prematuros que abarca desde el alta hospitalaria hasta los 7 años, añadió la Decana de la Facultad de Enfermería UdeC, Dra. Viviane Jofré Aravena. La también Directora de la Especialización en Enfermería en Neonatología detalló que este programa está enfocado “en detectar tempranamente problemas de desarrollo, crecimiento y nutrición, según el Programa de Seguimiento del Prematuro del Ministerio de Salud. El seguimiento es multidisciplinario, incluye evaluaciones neurológicas, sensoriales y del desarrollo, y se complementa con el Programa de Apoyo al Recién Nacido (PARN) que entrega implementos y educación a los padres”.
La importancia del apego
Para la o el recién nacido el vínculo comienza con el apego. Mirar, oler, la secreción de hormonas, tocar. Las y los bebés prematuros muchas veces no cuentan con estos actos, ya que deben estar en incubadoras, conectados a soportes para mejorar.
“Hay que dejar en claro que esos padres pueden retomar, que tampoco esa instancia va a definir que la o el niño no tenga el apego con sus padres”, recordó Matamala. La matrona contó que el personal que trabaja en neonatología incentiva “durante la hospitalización que (la madre o padre) los/as toque, que le hable, la técnica de madre o padre canguro que lo tenga en su pecho, que traspase su calor”.
El apego seguro es un factor protector para el desarrollo socioemocional. “También influye en la adquisición de funciones importantes para la salud mental, como la autoestima, las habilidades de afrontamiento y la resiliencia”, agregó la Dra. Jofré.
Aún no están claras las causas que provocan un parto anticipado en una gestante sana, pero hay maneras de prevenirlo: “que las pacientes embarazadas tengan un control prenatal adecuado, que se hagan las ecografías cuando corresponden. Ahí nosotros buscamos factores de riesgo e intervenimos para tratar de reducir esta complicación, que hacer todo nuestro esfuerzo sigue siendo muy frecuente”, cerró la gineco-obstetra.







