Flora de Chile dedica amplio volumen a gramíneas que crecen en el país
Crédito: Pixabay
El texto consta de más de mil páginas que contienen descripciones, claves e ilustraciones que facilitan la identificación de las 580 plantas que componen esta familia.
Las gramíneas, conocidas también como poaceae, constituyen una de las familias de plantas más grandes de Chile, concentrando más de 500 especies, tanto nativas como introducidas.
Este grupo es el objeto de estudio del Volumen 6, Fascículo 1: Poaceae de la Nueva Flora de Chile, proyecto de elaboración de un inventario actualizado de todas las plantas que crecen en el territorio continental, antártico e insular, que lidera la UdeC.
“Con este este libro se ha logrado un avance significativo en el desarrollo del proyecto. Es un trabajo científico muy minucioso que llevó varios años de estudio para alcanzar el objetivo que hoy se cumple”, afirma el director de la Nueva Flora de Chile y académico del Departamento de Botánica, Dr. Roberto Rodríguez Ríos.
Dada la gran cantidad de especies de esta familia, el volumen fue dividido en dos tomos, organizados alfabéticamente por géneros. Así, el primero va desde Agropogon a Hordeum, mientras que el segundo comprende los géneros Imperata hasta Zea, que en conjunto abarcan mil 100 páginas.
“El texto contiene descripciones, claves e ilustraciones que facilitan la identificación de las especies y en él trabajaron los más destacados especialistas del mundo, dirigidos por el Dr. Víctor Finot Saldías, académico de la Facultad de Agronomía de la UdeC hasta 2019.”, comenta el Dr. Rodríguez, quien es Profesor Emérito y director del Herbario de la UdeC.
Las gramíneas son una familia de plantas monocotiledóneas, que está representada por unas 12 mil especies en el mundo, dentro de las que se cuentan cultivos de importancia económica como el trigo, el arroz, la avena, el centeno, así como plantas forrajeras que sirven de alimento para animales.
En Chile existen más de 500 especies, distribuidas en unos 120 géneros y 8 subfamilias, que están presentes en todo el país. Desde el punto de vista de su origen se dividen en tres grupos.
“Están las nativas, que crecen además en otros países; las endémicas de Chile, es decir, que se encuentran sólo en el país, que comprenden alrededor de 70 especies y que representan cerca del 20% de la flora de gramíneas chilenas. Y por último, están las introducidas, la mayor parte originarias de Europa y Asia”, explica el editor del volumen y especialista en Botánica Sistemática, Dr. Víctor Finot.
Cerca del 10% de todas las gramíneas son introducidas; algunas para cultivo y otras crecen asilvestradas en el territorio nacional, acota.
Las plantas de esta familia están distribuidas en todos los ambientes y ecosistemas del país, dando lugar -en algunos casos- a formaciones típicas de típicas de praderas, vegetación altoandina y la pampa patagónica, agrega el Dr. Roberto Rodríguez.
“En otros casos, como cuando se trata de plantas introducidas, tienen importancia en la agricultura, pues varias especies tienen un carácter de maleza, donde una buena determinación es fundamental para el control de estas plantas por el Servicio Agrícola y Ganadero”, dice el académico.
Colaboración nacional e internacional
Víctor Finot indica que en este trabajo contó con la colaboración de reconocidos botánicos nacionales y especialistas de Argentina, Estados Unidos, Brasil y Colombia.
“Se trabajó durante varios años ya que no se realizó sólo una recopilación de datos previamente publicados, sino un trabajo actualizado que supuso mucha actividad de investigación, aun cuando teníamos publicados muchos trabajos previos sobre la diversidad y taxonomía de esta familia en el país”, explica.
Asimismo, señala que para la revisión de varios géneros contaron con la ayuda de los dos principales herbarios nacionales, el de la UdeC y el del Museo de Historia Natural de Santiago, que jugaron un papel muy importante para la revisión de especímenes.
Tras todo el trabajo recopilatorio, se llegó a un gran volumen que describe todas las especies reconocidas en Chile, con su nombre científico aceptado de cada especie, sinónimos, incluyendo la cita bibliográfica original de cada una, nombres comunes, si existen; distribución geográfica en Chile y su presencia en otros países.
Cada descripción se acompaña, además, de ilustraciones realizadas por dibujantes científicos, varias de las cuales provienen de publicaciones anteriores; así como de datos sobre diversidad, bibliografía y claves para la identificación de las especies.
El académico resaltó el apoyo de técnicos y profesionales de ambos herbarios, así como los aportes del Dr. Fernando Zuloaga, del Instituto Botánico Darwinion (Argentina), quien colaboró con dibujos para varias de las especies tratadas en el nuevo volumen.
“Esperamos que este volumen sea útil para muchos interesados en esta disciplina, así como para quienes utilizan la botánica como ciencia básica para estudios aplicados, como ocurre con los biólogos, ecólogos, ingenieros agrónomos, paisajistas, etc.”, puntualiza el investigador.
La Nueva Flora de Chile tiene como editores generales al Dr. Rodríguez y a la magíster en Ciencias mención Botánica, Alicia Marticorena Garri, quien reemplaza a su padre, Clodomiro Marticorena Pairoa (†) en esa función.
Esta nueva entrega está dedicada al ex académico del Departamento de Botánica, Oscar Matthei, fallecido en marzo de este año, quien era experto en taxonomía de gramíneas y malezas de Chile.
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