Fauna silvestre en peligro: el apoyo UdeC para salvar animales afectados por incendios forestales
Crédito: Esteban Paredes
En la emergencia, que ha dejado más de 450 mil hectáreas quemadas a nivel nacional, resultaron víctimas una gran cantidad de animales en las regiones de Biobío y Ñuble. La Universidad de Concepción facilitó instalaciones y profesionales para la atención gratuita de estos, a través de las unidades dependientes de la Facultad de Ciencias Veterinarias.
Si bien el grueso de los incendios forestales del periodo estival ya se encuentra bajo control y el trabajo de Bomberos, brigadistas y los organismos de emergencia se centra en focos específicos, la emergencia aún está lejos de acabarse.
Las reparticiones dependientes de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción redoblaron sus esfuerzos para recibir animales afectados por los siniestros, tanto por quemaduras como por complicaciones derivadas de la situación de catástrofe en las regiones de Biobío y Ñuble.
Uno de estos servicios es el Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre UdeC, ubicado en Chillán. Dirigida por la Dra. Paula Aravena Bustos, la unidad debió recibir una cantidad de pacientes considerablemente más alta respecto a los años anteriores, aumentando también los casos de mayor gravedad.
“Desde que se creó el Centro en 2004, cada año vamos recibiendo una cantidad mayor de pacientes. Usualmente tenemos más de 300 al año, pero desde febrero llevamos 56 individuos. La mayoría se encuentra impactada por los incendios, directamente quemados”, afirmó la académica.
Gran parte de las especies atendidas en el lugar son pudúes, 19 en total hasta hoy. A ellos se suman cinco monitos del monte, una güiña, una yaca, cuatro quiques, dos zorros chilla, un zorro culpeo, dos zorzales, tres gallinitas ciegas, un chuncho, un choroy, un tiuque, un pequén, seis tórtolas, un diucón, una diuca, un pato jergón, un fío fío, un halcón peregrino, dos queltehues y un aguilucho.
Colaboración fundamental
Los convenios suscritos entre la Universidad de Concepción y el Servicio Agrícola y Ganadero a principios de este año facilitaron las gestiones durante las emergencias forestales. El Decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias, Dr. Patricio Rojas Castañeda, indicó que esto permitió al SAG activar los protocolos para realizar las tareas de cuidado y tratamiento de animales afectados.
“El SAG estuvo a cargo del traslado de los animales. Al inicio, los hospitales clínicos de Concepción y Chillán y la clínica del Club Hípico realizaron el primer apoyo de estabilización y cuidados. Una vez estabilizados, los animales fueron trasladados a las dependencias del Centro de Rehabilitación”, explicó el Decano.
La colaboración ha sido clave para llevar a cabo las atenciones en las instalaciones de la Universidad de Concepción. El Decano de Ciencias Veterinarias, Patricio Rojas, destacó los apoyos del Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela Van Treek y las representaciones regionales de Agricultura y Salud, entre otros organismos.
Un caso de especial atención fue la ayuda brindada hasta hoy por el Ejército de Chile. “Tuvimos, a través del SAG, el apoyo del Ejército para tratar a animales mayores. El personal del Ejército ha estado trabajando en nuestras dependencias, para lo cual la Universidad puso a disposición todos los recursos”, afirmó el Dr. Patricio Rojas.
El Dr. Luis Gutiérrez, director de la Clínica Veterinaria UdeC, explicó que tras las coordinaciones con el SAG y considerando las características del recinto se resolvió trabajar como centro de paso para la fauna silvestre afectada, con el fin de incrementar las posibilidades de que recibieran posteriormente los cuidados especializados de rehabilitación.
“En la fase inicial entregamos atención primara a especies de fauna silvestre, como equipo médico entregamos primeros auxilios y, por, sobre todo, evaluación. Con algunas especies pasó que viajaron directamente a los centros de rescate y fallecieron en el camino debido a la gravedad que presentaban. Nosotros realizamos estabilización e incluso hicimos el primer abordaje, limpieza de heridas y quemaduras”, indicó.
Para ello, se debió dividir la Clínica en dos áreas; una para la atención y hospitalización de mascotas, dando continuidad al trabajo habitual, y otra para recibir a la fauna silvestre, que requiere un ambiente y tratamientos diferenciados.
Desafíos a futuro
La emergencia significó implementar protocolos especiales para la gestión de recursos. Al respecto, el Decano de Ciencias Veterinarias, Patricio Rojas agradeció las labores desplegadas por la Vicerrectoría de Asuntos Administrativos y Financieros, la Contraloría UdeC y todas las reparticiones
Sin embargo, aseguró que se debe elaborar una estrategia para el manejo de las catástrofes que se desarrollen en los años posteriores para contar con un flujo de trabajo permanente y que permita sostener la reacción rápida que se generó este año.
“Estas emergencias se van a mantener en el futuro y debemos trabajar en un sistema que nos permita continuar trabajando de manera expedita y desarrollar mecanismos especiales de funcionamiento en el periodo estival. Teníamos la experiencia de 2017 pero esto la sobrepasó”, dijo el Decano.
La Directora del Centro de Rehabilitación, Dra. Paula Aravena, sostuvo que el desafío es el mejoramiento de las instalaciones, tanto para la atención de animales como para aumentar la cantidad de profesionales formados en el área.
“Tenemos bastantes alumnos y profesionales que se han desarrollado en el área de vida silvestre, pero aún hay mucho por hacer. La meta es generar más profesionales capacitados en el área silvestre. De hecho, enviamos voluntarios de Chillán a Concepción para apoyar. No contamos con una infraestructura para recibir de un día para otro a más de 50 ejemplares, es un desafío pensando que estos animales estarán por lo menos seis meses en tratamiento”, aseguró.
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