Exalumno UdeC quiere ser "La Nueva Voz del Gol" de TNT Sports

“La gente me mira, dice ‘¿qué está haciendo este loco?’. Estoy gritando, señora. Estoy gritando, señor. El primer gol de Chile en Wembley. Marcelo Salas, en el final del primer tiempo. Se los digo de nuevo a los ingleses y a Chile. Marcelo Salas. Golazo. Chile hoy es de verdad”.

Ese relato es de Pedro Carcuro, del 11 de febrero de 1998 en uno de los estadios más famosos del mundo. De sus palabras se desprende que una de las cosas que no hay que tener para ser relator deportivo es temor al qué dirán, a quedar expuesto frente a miles y a veces millones de personas.

Eso lo tenía más que claro el periodista titulado de la Universidad de Concepción, Luis Escares Villa, 31 años, que en 2011 hacía su debut en el relato de fútbol justamente en su casa de estudios. 

En el marco del Campeonato Interfacultades, el lotino —que al igual que sus compañeros y compañeras de generación ese año estuvo largos meses sin clases por las históricas demandas estudiantiles— empezó un camino que muy pocas veces ha dejado de lado, porque es su verdadero motor.

Fue así que en abril de este año, un amigo que estaba postulando al programa La Nueva Voz del Gol de TNT Sports, lo recomendó con la producción. Lo llaman y le hacen relatar un fragmento del partido de Colo Colo con la Universidad de Concepción, cuando estaba en juego el descenso.

Todos y todas quienes buscan ser la Nueva Voz del Gol de TNT Sports / Crédito: Cedida

Pasaron tres semanas y él pensaba que no había quedado. Hasta que lo vuelven a llamar, esta vez para decirle que debía ir a Santiago para la siguiente etapa. Ya era un paso importante. 

Allá relató el partido de la Universidad de Chile ante Unión La Calera, cuando los laicos se salvaron milagrosamente del abismo. Pasan dos o tres semanas de nuevo. «Tienes que venir el miércoles porque hay que grabar. Eso fue un día lunes”, cuenta.

“Llegamos 20 personas allá y nos explicaron el modelo del programa. En él se busca un nuevo relator o relatora, donde cada semana se va eliminando una persona”, complementa.

Complejo inicio y vuelta al camino

Allá, la primera prueba era crear un relato propio. “Me fue pésimo. Recibí tres ‘No’ del jurado y quedé con la autoestima por el suelo. Ahí pasaron cinco de los 20 y los demás debíamos jugarnos nuestra chance en una prueba técnica que era un relato: Colombia-Chile del año 2009”, recuerda, en alusión al juego que devolvió a Chile a un Mundial tras doce años.

Se jugó su opción. El Poeta Orellana fue clave en ese partido, así que partió a googlear poesía chilena famosa y la acomodó al relato. Convenció al jurado y siguió en carrera para las diferentes pruebas, que ahora eran en pareja, donde empezaban a enfrentar diferentes facetas de lo que significa una transmisión televisiva.

En el Estadio Ester Roa Rebolledo, esperando comenzar a relatar uno de los partidos de Fernández Vial / Crédito: Cedida

“En este momento solo quedan 13 participantes”, añade Luis, quien trabajó en La Cuarta por casi un lustro, pero con el tema de la pandemia y una delicada condición de salud de su papá tuvo que devolverse a Lota para administrar la funeraria de su familia, por lo que su vínculo con el deporte solo se circunscribía a los relatos de los partidos de Arturo Fernández Vial.

Siguiendo al club ferroviario le he pasado de todo. Muchas veces, ante la ausencia de casetas de transmisión, la falta de criterio de los dirigentes de los demás equipos lo ubicaban entremedio de las barras rivales, donde sufrió incluso agresiones.

Le ha tocado dar la vuelta larga, lo mismo fue un factor que casi lo hace desistir de tan solo presentarse. “Fue difícil decir que sí por el qué dirán. Ya tengo 31 años y llevo un cierto tiempo en el relato y me da mucho pudor que dijeran ‘este tipo lleva tiempo en esto, por qué no deja el paso a otros’, que pusieran en tela de juicio mi trabajo”.

Pero ha sabido asimilar la crítica y los comentarios constructivos para seguir mejorando el relato.

“Si se gana sería fantástico, es coronar un largo trabajo de 11 años”, confiesa, donde muchas veces tuvo que transmitir partidos que no contaban con mucha audiencia. “Es gratificante llegar a un medio tan grande, que hayan visto algo en ti. Nakasone y los productores nos dicen que a todo el mundo le vieron algo. Ha sido un aprendizaje tremendo”, concluye.