Estudiantes UdeC viven día de aventura y conocimiento en el bosque nativo del Campus Naturaleza

En una jornada marcada por el frío y la humedad, un grupo de estudiantes de la Universidad de Concepción se unieron a una expedición por el Campus Naturaleza. A pesar del terreno desafiante, el entusiasmo y la curiosidad guiaron cada paso de este recorrido, convirtiendo un día húmedo en una experiencia informativa y reveladora.

Los y las afortunadas ganaron la oportunidad de visitar el Campus Naturaleza a través de un  sorteo que se realizó entre quienes participaron en la ceremonia oficial de recepción de la Bienvenida a estudiantes de la generación 2024, con la opción de llevar a un invitado/a.

El objetivo de esta actividad fue dar a conocer el proyecto de Campus Naturaleza, para que los y las estudiantes se vinculen con estas áreas naturales de la Universidad de Concepción que son muy importantes para la comunidad universitaria y del Gran Concepción, y de esta manera poder incorporar conceptos de biodiversidad, de ecología; pero al mismo tiempo también generar una salida recreativa donde estudiantes puedan disfrutar y distraerse, puedan respirar aire puro y contemplar la belleza que tienen los bosques nativos.

El sendero se inició en la Casa del Deporte hasta llegar al bosque nativo. En el lugar se pudo relevar la importancia de la protección y conservación del espacio, destacando especies importante y enfatizando en la condición única del sector de bosque caducifolio.

Testimonios

Pedro Núñez Moraga cursa segundo año de Ingeniería Civil en Telecomunicaciones. Sobre el recorrido, detalló que “ha sido un viaje bastante épico, interesante, porque se da pocas veces la oportunidad de poder conocer todo este tremendo terreno que hay acá. Es mi segunda vez visitándolo y debo decir que ha cambiado bastante. De hecho, pasamos por un mirador que antes no estaba”.

Otra cosa que le llamó la atención es la diferencia del aire, que a su juicio estaba muy limpio. “El tema de los sonidos también es muy diferente. Acá hay mucho silencio que se interrumpe con los ruidos de las aves. El sonido cuando uno pisa en las hojas también es bastante relajante. Ayuda a uno a liberarse del estrés”, comentó.

Mucho más impactante fue el recorrido para dos estudiantes provenientes de Antofagasta: Antonia Olivares Huerta de Ingeniería Civil Electrónica y Terence O’Mahony Silva de Ingeniería Civil Matemática. La primera explicó que se vino a Concepción, entre otras cosas, porque le encanta la naturaleza, ver mucho verde y estar rodeada de plantas y animales. En tanto, el segundo contó que es una buena iniciativa la que está tomando la Universidad de Concepción, porque el contacto con la naturaleza siempre es necesario para crear conciencia sobre la importancia de esta.