Especialista advierte cuidados en uso de parrillas eléctricas durante Fiestas Patrias

Fácil de encender, más transportable y no emite humo, por eso algunas personas prefieren la parrilla eléctrica al momento de asar la carne para Fiestas Patrias. Sin embargo, su uso -al igual que cualquier otro método- requiere de ciertos cuidados para evitar accidentes.

El académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica, Dr. Luis García Santander, entregó algunos consejos para el uso correcto de estos aparatos. En esa línea, dijo que lo primero es revisar la instalación eléctrica donde se va a enchufar el aparato, ya que por estos cables circularán cerca de 10 amperes, lo que, en algunos casos, podría provocar un corte de energía en la casa.

“El primer cuidado en el uso tiene que ver con la instalación eléctrica en donde se va a enchufar, debemos asegurarnos de que la instalación soportará la corriente que la parrilla va a pedir. Normalmente una parrilla eléctrica tiene una potencia de 2000 W, lo que hace que por los cables de la instalación eléctrica circulen casi 10 Amperes, lo cual podría hacer que el automático opere (se corte la luz)”, explicó.

“Adicionalmente, un cuidado relevante es que los cables de la parrilla no estén con perforaciones (rotos o pelados) puesto que las personas que estarán haciendo el asado seguramente tendrán las manos húmedas y podrían pasar a tocar dichos puntos con el riesgo de electrocución”, puntualizó.

Con respecto al consumo de los aparatos, el Dr. García calculó que “hoy en Concepción el costo promedio es de 220 $/kwh. Una cocción de una porción carne, pollo y longaniza para una familia de 4 personas, toma un tiempo de entre 30 a 50 minutos. Una parrilla eléctrica  de 2000 Watt, operando una hora implica un consumo de 2 kwh; es decir, tiene un costo de $440. Creo que eso es barato”.

Eso sí, llamó a tener precaución con el tiempo prolongado de uso ya que, independientemente de que estos equipos posean un termostato que les permita “apagarse” cuando alcanza cierta temperatura, no hay que dejarlos sin vigilancia para evitar cualquier desperfecto.

“Normalmente las parrillas eléctricas traen un termostato que permite regular la temperatura de cocción y por lo tanto si la temperatura aumenta esta se regulará automáticamente haciendo que «se apague», volviendo a encenderse sola cuando la temperatura haya bajado. Obviamente no es recomendable dejar encendida permanentemente la parrilla, por ejemplo, ir a comer para luego volver a ver cómo va «el asado», siempre es recomendable estar bajo supervisión. Los niños siempre deben permanecer alejados del equipo”.