Un hallazgo inesperado en los depósitos del Archivo Central de la Secretaría General ha contribuido a acrecentar el patrimonio documental en torno al Teatro de la Universidad de Concepción (TUC), uno de los íconos de la cultura local y la dramaturgia nacional del siglo XX.
Bolsas de papel, con el rótulo TUC escrito a mano, atesoraban una serie de objetos vinculados a distintos momentos de una historia que comenzó el 19 de noviembre de 1945 con el montaje de La Zapatilla prodigiosa de Federico García Lorca.
Desde entonces, el TUC -la agrupación aficionada que devino rápidamente en una compañía profesional- proyectó su labor por casi tres décadas con una trayectoria ascendente que fue interrumpida abruptamente por el golpe cívico militar de 1973.
En 2018, 45 años después de la disolución de la compañía teatral, se produjo el hallazgo en el Archivo Central.
La coordinadora y conservadora del Archivo Fotográfico de la UdeC (Afudec), Claudia Arrizaga Quiroz, recuerda que el hecho ocurrió durante una visita programada dentro de un seminario inserto en un proyecto Fondart bajo su dirección.
La sorpresa no solo fue para ella, sino también para los especialistas de instituciones como el Archivo Nacional y la Biblioteca Nacional, entre otras, que participaban de la actividad.
El sencillo envoltorio traía al presente diversos fragmentos de la memoria del TUC, registrados entre 1952 y 1972.
“Es un conjunto documental de incalculable valor que nos conecta a un momento único de nuestra historia institucional”, comenta la profesional.
Son 367 fotografías en varios formatos, 105 programas de distintos montajes y 19 recortes de prensa, más algunos afiches, que desde el año pasado están en cesión temporal en las dependencias del Archivo Fotográfico, en la Pinacoteca, dirección de la que depende.

Tratamiento archivístico
Con este traslado, se inició un programa formal de trabajo para organizar el conjunto documental que ahora se conoce como Archivo Foto/Gráfico TUC.
El objetivo fue gestionar los documentos bajo estándares internacionales, de manera de darle una estructura acorde a sus características formales y de contenido, explicó la experta en conservación documental.
“Esto es aplicar metodología archivística ‘pura y dura’ que es lo que hemos estado haciendo en la organización de estos documentos”, agregó Arrizaga.
La encargada de procesos técnicos de Afudec, Tanya Barrera Ríos, realizó las primeras intervenciones de la colección, con el retiro de elementos que pueden dañar los documentos como clips, corchetes, adhesivos, entre otros.
“Es un trabajo que hay que hacer con mucho cuidado, porque se pueden arrancar partes del papel o dañar la fotografía”, señaló la archivista.
A ella le ha correspondido realizar gran parte del proceso de identificación de las imágenes, cruzando información de los programas, usando inteligencia artificial; conversando con actores y actrices que fueron parte del TUC y con quienes han investigado sobre la agrupación.
De este modo, ha ido adentrándose en una área de la Universidad que no conocía y que ha estado investigando para llenar interrogantes sobre los documentos.
“Es una historia preciosa, a la que le faltan piezas, pero que se va a seguir construyendo en conjunto, porque los archivos no son lo que dicen los archiveros, se hacen en comunidad”, dijo.
El equipo de trabajo ya concluyó las fases de descripción y digitalización del material y se proyecta que durante el primer semestre de 2026 la colección esté ingresada en el Catálogo en Línea del Archivo Fotográfico de la UdeC.
En paralelo, los documentos ya tratados están debidamente resguardados para asegurar su conservación. “Tenemos el material libre de ácido para guardar cada documento y dos planeras que adquirió nuestra dirección para su almacenamiento”, contó la coordinadora de Afudec.
No solo teatro
Los materiales de la colección, de acuerdo a Claudia Arrizaga, muestran muy bien “el proceso de registro fotográfico” que hizo la compañía desde el momento de su profesionalización.
Ahí se encuentran los retratos de rostros emblemáticos de la agrupación como Shenda Román, Delfina Guzmán, Nelson Villagra, el director Pedro de la Barra, entre otros, y escenas de los montajes que se sucedieron a lo largo de las dos décadas que cubre la colección.
Pero este archivo no es solo teatro: también hay registros de hechos que ocurren fuera del campo netamente actoral.
Ejemplo de ellos son las imágenes de las actividades promocionales relacionadas con Población Esperanza de Isidora Aguirre y Manuel Rojas, uno de los montajes más relevantes del TUC, estrenada en 1959. La obra, dirigida por Pedro de la Barra, le valió el Premio de Teatro otorgado ese año por el Círculo de Críticos de Arte de Chile.

La especialista apuntó que el conjunto de imágenes permite por otro lado, “leer” otros aspectos de la época del apogeo del teatro universitario del sur de Chile.
Desde allí, se puede contar algo de la historia de la fotografía local, siguiendo la huella de los estudios fotográficos y de las personas que trabajaron de cerca con el TUC.
Por otro lado, también es posible construir una visión sobre desarrollo del diseño gráfico local, a partir de los programas y catálogos, así como de otras disciplinas asociadas a las artes escénicas.
Tanya Barrera descubrió en estos materiales la impronta del artista Julio Escámez en el teatro, con su participación en el diseño de escenografías, de vestuario y de los programas.
Referente e inspiración
El nuevo fondo documental, que se suma a otras colecciones patrimoniales sobre el TUC – de fotografías y de prensa, además de archivos sonoros de la radio universitaria- ha cobrado un nuevo sentido con la apertura de la carrera de Teatro en la UdeC, hace dos años.
En esa perspectiva, de acuerdo a Claudia Arrizaga, el desafío de la labor documental y la conservación del patrimonio visual universitario en torno al TUC adquiere una dimensión mayor.
El contenido de esta colección es un referente y una inspiración tanto para quienes se inician en la senda de las artes escénicas como para quienes están a cargo de su formación.
“Nuestro compromiso es garantizar que las huellas de ese linaje teatral se transformen en evidencias concretas de un camino recorrido que sirva de fuente y conocimiento para las nuevas generaciones vinculadas a las artes escénicas”, puntualizó.








