Semana Mundial de la Lactancia Materna: un pilar para el bienestar infantil, la familia y la salud pública

Crédito: Esteban Paredes Drake / Dircom
La OMS recomienda la lactancia exclusiva por mínimo 6 meses y complementaria hasta que madre y bebé lo decidan. La iniciativa invita a reflexionar sobre los múltiples beneficios de la lactancia, no solo para madres e hijas/os, sino también para la economía familiar y la sostenibilidad de los sistemas de salud.
Del 1 al 7 de agosto se conmemora la Semana Mundial de la Lactancia Materna, instancia destinada a destacar el derecho de la primera infancia a una alimentación adecuada y saludable desde el inicio de la vida. La lactancia materna comprende tanto la alimentación directa al pecho como la entrega de leche materna extraída y administrada mediante mamadera o vaso, modalidades que buscan garantizar sus beneficios en distintas realidades y contextos familiares.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva por seis meses y complementaria hasta los dos años o más. Sin embargo, alrededor de un 60% de las mujeres logran esta meta, debido a múltiples factores, asociados tanto a la madre como al recién nacido. Entre las principales dificultades se encuentra la incorporación o permanencia de la mujer en el trabajo, lo que muchas veces dificulta el tiempo y las condiciones necesarias para mantener este tipo de alimentación.
La lactancia tiene múltiples beneficios para niños, niñas, madres, sus familias y también para la salud pública en general, explicó la docente del Departamento de Obstetricia y Puericultura, matrona Daniela Suazo Flores. Para los bebés los beneficios parten en la obtención de la microbiota de la madre, pues “adquiere los microorganismos que están presentes en la leche materna y eso le ayuda a mejorar y fortalecer sus defensas, y lo prepara para enfrentar las enfermedades, virus respiratorios u otros que pueden enfrentar sobre todo en los primeros meses”, explicó la especialista en perinatología.
La madre, por su parte, disminuye el riesgo de desarrollar cáncer de ovario, cáncer de mama y diabetes tipo 2 a futuro. “Permite una mejor recuperación después del parto, menos hemorragia, la recuperación de peso previo al embarazo, siempre que eso igual se acompañe de un estilo de vida saludable”, agregó la docente. Dentro de los beneficios para toda la familia, ayuda en la economía, ahorrando el valor de las fórmulas. La salud pública también se ve beneficiada, pues la leche materna disminuye las enfermedades en los recién nacidos.

“También están involucrados otros aspectos que son tan importantes para el desarrollo humano, como lo es el apego, el vínculo, el desarrollo psicomotor del niño recién nacido, el aspecto del desarrollo neurobiológico”, sumó la docente del departamento de Obstetricia y Ginecología, matrona Soledad Gutiérrez Mellado.
La docente, que también se desempeña en el Hospital Guillermo Grant Benavente, explicó que “está comprobado que, si un bebé está enfermo, resfriado, la leche va a cambiar, y se va a adaptar a las necesidades de ese niño, la madre va a producir una leche que se adecua a esas necesidades”.
«Dar prioridad a la lactancia materna: crear sistemas de apoyo sostenibles»
Cada año, los organismos que impulsan la campaña mundial eligen un lema, siendo el de 2025 “Dar prioridad a la lactancia materna: crear sistemas de apoyo sostenibles”, interpelando a la sociedad y los propios países en su rol para facilitar este proceso.
En Chile, la Ley 20.545, promulgada en 2011, busca la protección de la maternidad e incorporó el permiso postnatal parental, como una forma de fomentar la lactancia materna en nuestro país. Antes de eso, el postnatal era solo de 3 meses, quedando hoy en 5 meses y medio. “También existe la hora de alimentación de la madre hacia el niño y esa consiste en una hora diaria para alimentar al recién nacido independiente de si está con lactancia o no, igual la mujer tiene derecho a esa hora que está vigente hasta los 2 años de vida”, explicó Suazo.
Además, destacó la matrona Soledad Gutiérrez, nuestro país cuenta con el robusto programa Chile Crece Más (antes Chile Crece Contigo), que implementa capacitaciones, compañía, talleres y material educativo integral para los bebés y sus familias.

Daniela Escobar Vigueras, periodista y madre de Facundo de 4 meses, alimenta a su bebé solo con leche materna. Aprovechó todos los talleres ofrecidos en su Cesfam, pero le costaba entender el tema del acople y la posición en que debía tener a su bebé, ya que todos esos talleres se desarrollan antes del nacimiento. «Cuando nació Facundo, en la misma sala de parto, yo pude darle y vi que salía leche de mi mama, eso me tranquilizó”, contó.
Fueron visitados por matronas de su Cesfam en el hogar, quienes le entregaron técnicas y enseñaron a mejorar su lactancia, dejando el relleno que había comenzado a darle a Facundo, pensando que solo su leche no era suficiente. “Ahí está nuestro rol profesional de orientar hacia la búsqueda de redes de apoyo en esa mujer, previo a que llegue el momento, porque si logramos pesquisar que esta mujer tiene algún problema de salud mental, lo más probable es que se agudice en ese proceso”, identificó Gutiérrez, quien sumó que “todo está vinculado a favorecer el apego, el vínculo y el desarrollo psicomotor del niño, niña o lactante”.
- Compartir
- Compartir
Noticias relacionadas
Reportajes