Probiótico fortalecedor del sistema inmune en abejas desarrollado en la FCB recibe patente de la INAPI
Crédito: FCB
La cepa probiótica, denominada Lacticaseibacillus casei, fue creada en el Laboratorio de Patogenicidad Bacteriana de la FCB y busca aumentar la sobrevida de las abejas de la miel (Apis mellifera).
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), un tercio de la producción mundial de alimentos depende de las abejas, gracias a la gran capacidad polinizadora de esta especie. Sin embargo, debido a diversos factores, la población de colmenas ha disminuido en hasta un 50% a nivel mundial, amenazando al medio ambiente, a la industria alimentaria y a la economía de apicultores y agricultores.
Con el objetivo de contribuir a la sobrevida de las abejas de la miel (Apis mellifera) a través de un mecanismo que permita fortalecer su sistema inmune, un equipo de investigadores del Laboratorio de Patogenicidad Bacteriana de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Concepción, liderados por la Dra. Apolinaria García, desarrolló la cepa probiótica denominada Lacticaseibacillus casei, trabajo científico que recientemente obtuvo la patente del Instituto Nacional de Propiedad Intelectual (Inapi).
Este nutrialimento es capaz de prevenir y controlar las infecciones causadas por diversos patógenos, al tiempo que se busca convertirse en una solución amigable tanto para las abejas, como para los apicultores y el medio ambiente. La Dra. García expresó que “estamos muy entusiasmadas con este logro, ya que nos permite avanzar en la validación de este producto para su futura transferencia tecnológica”. La académica agregó que “han pasado cinco años desde que esta idea dio origen a una nueva línea de investigación, centrada en el desarrollo de probióticos para abejas. Obtener la concesión de esta patente nos llena de orgullo”.
Según indicó la científica, “este avance beneficiará a las industrias apícolas, agropecuarias y veterinarias de Chile al reducir la mortalidad de las abejas, aumentar la polinización y la producción de vegetales de importancia comercial, así como incrementar la producción de miel y sus derivados, lo que tendrá un impacto directo en la economía del país”.
Junto a la investigación científica, el desarrollo de este probiótico fue posible gracias a la adjudicación del Fondo Jóvenes Innovadores de la Fundación de Innovación Agraria (FIA), además del trabajo colaborativo con la Asociación Gremial de Apicultores de Concepción y con el apicultor Freddy Toledo. En tanto que el equipo de inventores está integrado, además, por la Mg. Romina Carvajal, la Mg. Fabiola Silva, a la Dra. (c) Alejandra Ilabaca, el Ing. Jorge Rocha y el Dr. Felipe Zúñiga.
Actualmente, se están llevando a cabo validaciones adicionales del probiótico en más colmenas con el objetivo de transferirlo y comercializarlo en el corto plazo.
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