Estudio UdeC: Santiago es la segunda ciudad de América Latina que más disminuyó su contaminación en pandemia
El informe fue publicado recientemente en la revista científica Urban Climate por su pionero aporte al relacionar la reducción de movilidad durante la pandemia de Covid 19, la variación del fundamental contaminante NO2 y los cambios en el tiempo atmosférico que pudieron influir en aquellas variaciones. En la capital la reducción de dióxido de nitrógeno fue de 36%.
Un 26% en promedio redujeron la contaminación por dióxido de nitrógeno las grandes ciudades de América Latina durante la pandemia de coronavirus, mientras que las con menos de 5 millones de habitantes lo hicieron en un 13% promedio, según el primer estudio sobre la materia que relaciona las restricciones de movilidad -y su efecto en el transporte-, los cambios en este principal contaminante atmosférico y variables en el clima que pudiesen haber influido en estas reducciones de NO2. El estudio de científicos de la Universidad de Concepción, “Impacto de las restricciones a la movilidad en las concentraciones de NO2 en ciudades clave de América Latina durante la primera oleada de la pandemia COVID-19”, fue desarrollado por los investigadores Matías Volke, Rodrigo Abarca del Río y Claudia Ulloa Tesser.
Las ciudades que presentaron una disminución significativa en las concentraciones de NO2 entre marzo y junio de 2020 fueron Lima (47,5%), Santiago (36,1%), Sao Paulo (27%), Río de Janeiro (23%), Quito (18,6%), Bogotá (17,5%), Buenos Aires (16,6%), Guayaquil (15,3%), Medellín (14,2%), La Paz (9,5%), Belo Horizonte (7,8%), México (7,6%) y Brasilia (5,9%). Para estas ciudades no se observó ningún cambio significativo producto de variables meteorológicas como temperatura, viento o precipitaciones, primero en comparación con el mismo período de 2019 y tampoco con una década anterior, según mediciones realizadas con satélites.
Matías Volke es estudiante del doctorado de Energías de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción, Rodrigo Abarca del Río es geofísico del Departamento de Geofísica de la misma casa de estudios, y Claudia Ulloa Tesser es investigadora del Departamento de Ingeniería Ambiental de la Facultad de Ciencias Ambientales de la U. de Concepción.
Según el estudio, hubo algunas ciudades que aumentaron su concentración de dióxido de nitrógeno, específicamente Asunción, Caracas, Montevideo y Córdoba (Argentina), por lo que, en estos casos, las variables meteorológicas pueden haber influido en el aumento de las concentraciones de NO2. Por ejemplo, la cuarentena parcial y las lluvias por debajo del promedio de marzo a mayo en Montevideo habrían aumentado la probabilidad de altas concentraciones del contaminante. En tanto, en Caracas se registraron precipitaciones limitadas de marzo a junio de 2020.
Sin efectos climáticos, Lima, Santiago, Sao Paulo, Ciudad de México, Bogotá y Río de Janeiro “exhibieron una mejor reducción promedio en las concentraciones de NO2 que las ciudades menos pobladas, a pesar de que cuatro de estas seis ciudades solo tenían cuarentenas limitadas. Así, la reducción de la contaminación fue mayor en los lugares con más habitantes y menos restricciones”, destaca la investigación.
El dióxido de nitrógeno tiene una influencia sustancial en la salud humana directamente a través de la inhalación e indirectamente por medio de su papel como precursor de contaminantes secundarios como Ozono y partículas PM2.5 que afectan el sistema respiratorio. Mientras que las emisiones de NO2 de las ciudades están vinculadas principalmente a la combustión de diésel y gasolina en el sector del transporte.
“Este estudio compara los registros troposféricos de NO2 de las imágenes satelitales Sentinel-5P de marzo a junio de 2019 y 2020… Además, incluimos el conjunto de datos satelitales de tropoNO2 más completo disponible desde 2011 hasta 2020, del satélite de la misión OMI”, más los análisis del tiempo atmosféricos con el satélite ERA5, señala la investigación. Por ello, el mismo estudio indica en sus observaciones que “estos resultados demuestran la promesa de usar mediciones basadas en sensores remotos para monitorear la respuesta de la contaminación del aire a las políticas actuales y futuras de regulación de emisiones de las ciudades”.
Además, se estudió los niveles de movilidad indicados por aplicaciones de ubicación por GPS de Google y Apple para analizar el comportamiento real de las personas afectadas por las restricciones por la pandemia durante el período analizado. “Google informó una caída en los desplazamientos de los ciudadanos, un aumento en la movilidad en el hogar y una disminución en la movilidad hacia los lugares de trabajo y las terminales de transporte. La disminución en el uso de la conducción y el transporte registrada por Apple apoyó esta hipótesis. Por lo tanto, las áreas con una alta reducción en las concentraciones de NO2 mostraron un vínculo significativo con una menor actividad y movilidad relacionadas con el transporte, el principal contribuyente de NO2”, concluye el trabajo.
- Compartir
- Compartir
Noticias relacionadas
Reportajes