Equipo de monitoras y monitores institucionales da la bienvenida a 18 integrantes

Transmitir la experiencia de estudiar en la mejor universidad del sur de Chile y la tercera a nivel nacional, conversar sobre becas y créditos, las actividades extraprogramáticas, la belleza de sus campus y las 90 carreras disponibles en la Universidad de Concepción. Estas son algunas de las labores que realizan las monitoras y los monitores institucionales, “embajadores” UdeC durante todo el año.  

Como en todo proceso donde existe recambio, llegó la época en que las y los estudiantes de cursos superiores dejan la actividad para dedicarse completamente a finalizar sus carreras, dejando espacio para las nuevas generaciones. De esta forma, 18 estudiantes se integran a un equipo que maneja temas tan diversos como ingresos especiales, historia, acreditación, rankings o patrimonio.  

“Deben tener claridad de todo lo que están contando, estar actualizados porque se someten a una ronda de preguntas de los alumnos” explicó la Coordinadora de Puertas Abiertas, Janine Alé Goñi. La unidad, que trabaja bajo el amparo de la Dirección de Comunicaciones, se encarga de coordinar las charlas en colegios el equipo de monitoras y monitores deben realizar, entregando información para posibles postulantes UdeC. Además, afirmó Alé, requieren profunda preparación para el gran evento que realiza la Universidad cada octubre: la Feria Puertas Abiertas. En la última versión más de 18 mil personas visitaron la muestra, interesadas en integrarse a la Casa de Estudios.  

Amor y pasión por su universidad 

Su grupo cercano le decían a Sarai Silva Carreño que era perfecta para el trabajo “porque antes de ser monitora (formalmente), ya lo era, debido a mi amor por la Universidad”. La estudiante de Administración Pública y Ciencia Política contó que “he ido a ferias, he hecho visitas guiadas. Las ferias han sido a todo lo largo de Chile con muchísimos colegios, muchos niños muy interesados”. 

Esta experiencia la comparte el monitor Kevin Plaza Herrera. El estudiante de Derecho se integró hace un tiempo al equipo y hoy entrega sus aprendizajes a las  nuevas y nuevos compañeros, aconsejándoles que disfruten al máximo la experiencia. “Más que un trabajo, es un amor a la Institución. Y siento yo que lo que más abunda en nuestro equipo es el compañerismo, la empatía y el apego”, destacó. 

Crecimiento que sirve para sus carreras 

Joaquina Vázquez Cerda, estudiante de segundo año de Tecnología Médica, es parte de las recién integradas monitoras. Dejó su natal Maule para llegar al Biobío a estudiar y crecer como persona, siendo guiada por un monitor institucional. “Quiero tener ese mismo impacto en los estudiantes de futuro”, describió.

Joaquina espera que este trabajo le ayude “a agarrar confianza para poder conversar con las personas, comunicarme y aprender a atender gente”, algo que impactaría directamente en su carrera.  

Desde Osorno llegó Benjamín Jiménez Gallardo, estudiante de segundo año de Ingeniería Civil Química. Siendo parte de este grupo pretende apoyar a las personas que quieren integrar la comunidad universitaria, ayudando a que se sientan bienvenidos e integrados. Destaca la oportunidad de mejorar en las “habilidades blandas que nosotros desarrollamos como estudiantes, algo que claramente es primordial para la salida laboral que nosotros vamos a tener de aquí a futuro”. Ya pudo acompañar algunas visitas guiadas al campus, aprendiendo de la experiencia de sus compañeros monitores. “El impacto que se puede generar en esas instancias es lo que más me entusiasma”, agregó.  

Una monitora o monitor institucional debe tener una visión general de toda la realidad de la Institución. “Y, de verdad, tenemos un equipo de élite. Porque no solamente trabajan para Puertas Abiertas, sino que también otras dependencias internas de la Universidad nos solicitan el apoyo de nuestro equipo porque manejan transversalmente muchos temas”, concluyó Alé.