Amplia revisión de medidas de prevención en reparticiones de la UdeC

La emergencia sanitaria implicó una modificación de todos los protocolos universitarios. En este contexto, una acción relevante ha sido cautelar que en aquellas reparticiones universitarias donde se han realizado actividades presenciales se cumplan dichos protocolos y los consiguientes procedimientos exigidos. Para ello, el Comité de Crisis ha desarrollado inspecciones a las facultades y organismos universitarios.

Hasta diciembre de 2020 se habían revisado más de 10 reparticiones, a cargo de un equipo de prevencionistas de riesgos y profesionales de Matpel, integrantes del Comité de Crisis.

Una de estas reparticiones fue la Facultad de Ciencias Químicas, donde la revisión se centró en el cumplimiento del control de acceso, aforo definido para cada laboratorio, la disposición y uso de elementos de protección personal, ventilación y disposición de basuras. En este caso, además, se revisó el cumplimiento de la normativa sobre almacenamiento de las sustancias peligrosas utilizadas en los laboratorios, expresó Enrique Mac Iver, prevencionista de riesgos e integrante del Comité de Crisis.

Al término de cada revisión se levanta un Plan de Mejoras para subsanar las observaciones que se hayan levantado durante las inspecciones, con plazos de cumplimiento acordados por los encargados de cada repartición, acotó Gonzalo Parra.

Continuidad de las investigaciones

Para el Decano de la Facultad de Ciencias Químicas, Dr. Eduardo Pereira Ulloa, quien participó de esta visita inspectiva, es relevante que se realicen estas revisiones y cumplir con los protocolos de prevención de la Universidad.

“Nuestra principal actividad tiene que ver con aspectos experimentales. Para nosotros, no trabajar en nuestros laboratorios produce un daño enorme en el desarrollo de las investigaciones y proyectos de nuestros estudiantes. Por ello, estamos comprometidos en el cumplimiento de las indicaciones del Comité de Crisis para tener la autorización de funcionamiento, aunque sea con aforos reducidos, y así responder a las demandas de académicos, académicas y estudiantes que esperan avanzar en sus investigaciones”, subrayó el Decano.

Una opinión similar expresó Miguel Gallardo, estudiante de postgrado, para quien es importante conciliar el cumplimiento de las medidas de prevención y la continuidad de las actividades críticas.

“Antes trabajábamos desde las 9.00 a las 19.00 horas en los laboratorios. Ahora los tiempos son más reducidos, pero organizándose bien se puede avanzar y dar continuidad a las investigaciones. Ha sido complicado, pero, en este tiempo nos hemos ido adaptando a todas las medidas de seguridad y prevención adoptadas por la Universidad y la Facultad”, precisó.

Actividad deportiva

Otras de las dependencias universitarias inspeccionadas fueron los gimnasios A y B de la Casa del Deporte, que a partir del 4 de enero abrieron sus puertas, pero cuyas actividades son autorizadas y se rigen por las normativas del Ministerio del Deporte.

Sandra Aguilar, asesora de la ACHS en el Comité de Crisis, señaló que, en este ámbito, una tarea esencial es delimitar los aforos y espacios para uso de funcionarios, para las prácticas y partidos oficiales, aunque estos se realicen sin público.

“Se permite un máximo de 10 personas trabajando y se deben delimitar y marcar los espacios para los funcionarios que dan soporte a estas actividades y hacen la mantención de la Casa del Deporte. Además, se debe revisar que se cumplan los protocolos en cuanto a seguridad y distancia social, previo al ingreso a las canchas y durante la realización de estas actividades deportivas”, concluyó la asesora de la ACHS.