Profesor Renato Herrera: recuerdo de un apasionado por la microbiología
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El Dr. Herrera deja grandes aportes a la Universidad de Concepción y al Departamento de Microbiología, que fue su casa siempre, pero sobre todo una huella en las personas que tuvimos el privilegio de conocerle.
Nacido en Polcura, provincia de Biobío, el 21 de marzo de 1927. Realizó sus estudios primarios y secundarios en el Liceo de Concepción, actual Liceo Enrique Molina. Estudió Dentística en la Universidad de Concepción recibiendo el título de Cirujano Dentista en 1950, otorgado por la Universidad de Chile. Durante los años 1957 y 1958 realizó estudios de postgrado en la Universidad de Michigan gracias a una beca otorgada por W.K Kellogg Foundation.
Dr. Renato Herrera, estimado Profesor, es una tarea difícil resumir en pocas palabras la biografía de una persona con tantos talentos, principios y valores, una persona comprometida, generosa y correcta en el amplio sentido de la palabra.
Muchos años han transcurrido desde que me presenté en su oficina en mi calidad de alumna tesista del Programa de Microbiología y más tarde pude compartir y conocerle como persona, estimado amigo y colega.
Durante su extensa trayectoria en el departamento de microbiología formó parte de la vida de muchos colegas y alumnos de pre y post grado. Una parte importante de su vida estuvo dedicada a la labor administrativa ocupando diversos cargos como Director del Departamento de Microbiología, Director del Instituto de Ciencias Médico Biológicas, Decano de la Facultad de Ciencias Biológicas y de Recursos Naturales.
Siempre su gran preocupación fue la docencia, la formación de personas y la investigación. Es así como en 1977 siendo Director del Instituto de Ciencias Médico Biológicas, propuso a las autoridades universitarias la creación de un Programa de Magister en Ciencias con mención en Microbiología. Este Programa fue aprobado e inició sus actividades al año siguiente, teniendo gran aceptación en nuestro medio, como lo demuestra el hecho de que en su última acreditación se obtuvo 9 años y a la fecha ya cuenta con 156 egresados provenientes de las diversas Regiones de nuestro país, pero también ha alcanzado prestigio internacional y así contamos con 12 egresados de diversos países latinoamericanos. Es uno de los programas de postgrado más antiguos que tiene la Universidad.
Apasionado por la microbiología, siempre cálido, sencillo, acogedor y entusiasta, dispuesto a apoyar nuevas ideas, siempre a la vanguardia de los conocimientos. Por su oficina íbamos muchas veces a pedir consejos académicos o personales, material de trabajo que siempre compartió con generosidad, por ejemplo cuando nos anunciaba la llegada del Current Counting, con el listado de las últimas publicaciones de la disciplina !!
Recordabamos con mis colegas María Ángelica Mondaca y Edilia Andrews el momento de la pausa del café en su compañía que fue siempre una actividad esperada, pues al iniciar su carrera académica siendo tan joven, el Dr. Herrera conocía a muchas personas y siempre tenía sabrosas anécdotas para compartir, además con su espacial sentido de humor nos relataba historias de cuando él había llegado a Concepción a estudiar al Liceo de hombres.Como no mencionar los inolvidables y gratos momentos compartidos en su casa en Polcura, donde nos invitaba a todos y se nos permitía “comer cerezas al pie del árbol”.
Durante su extensa vida académica recibió varias distinciones: Premio Virginio Gómez, Premio Alfonso Leng de la Universidad de Chile y Premio de la Sociedad Chilena de Infectología.
En reconocimiento a su trayectoria académica y compromiso con la actividad universitaria fue investido como Profesor Emérito en 1996.
El Dr. Herrera deja grandes aportes a la Universidad de Concepción y al Departamento de Microbiología, que fue su casa siempre, pero sobre todo una huella en las personas que tuvimos el privilegio de conocerle y que le recordaremos siempre con respeto, cariño y admiración por su calidad moral y su talento intelectual.
Gracias Dr. Herrera por su entrega y sus enseñanzas.
Hasta siempre.
Columnista(s)
Verónica Madrid Valdebenito
Académica Departamento de Microbiología
Facultad de Ciencias Biológicas
Universidad de Concepción
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