Reconocimiento a la trayectoria: las y los integrantes de la Comunidad UdeC que cumplen 25 o 30 años de servicio

Este 2021, por segunda vez consecutiva y debido a la emergencia sanitaria, la ceremonia del Día del Trabajador(a) Universitario(a) se realizó de manera virtual.

En sus palabras, los homenajeados y homenajeadas develan una identidad que va de la mano con su casa de estudios, donde muchos y muchas cursaron sus estudios y actualmente son funcionarios o funcionarias UdeC.

La primera cohorte en ser homenajeada, quienes cumplen 25 años de servicio, hizo su ingreso a la institución en 1996, y el segundo grupo —que completa 30 años de servicio— lo hizo en 1991.

En esta ocasión, son 48 funcionarios y funcionarias que cumplen 25 años en la UdeC y 72 funcionarios y funcionarias que llegaron a los 30 años de trabajo. A continuación presentamos algunos testimonios.

25 años bajo el alero de la UdeC

Una de las funcionarias que cumple 25 años de servicio es Olga Elisa Elgueta Barrera, secretaria en la Sección de Servicios Estudiantiles (DISE) del Campus Chillán de la Universidad de Concepción, quien detalla que en el ámbito familiar, “cuando veía el nombre de la Universidad de Concepción, distinguida dentro de las Mejores Empresas para Madres y Padres que Trabajan, era satisfactorio corroborar en primera persona la validez de los reconocimientos obtenidos”.

Su esposo también forma parte de la UdeC desde hace 28 años, y tienen en común un hijo de 14 años de edad, quien fue parte de la primera generación que inauguró la Sala Cuna y Jardín Infantil Pequeñitos UdeC, luego de su puesta en marcha al interior del Campus Chillán.

Otro de los homenajeados es Armando Bernardo Cartes Montory, Profesor Titular del Departamento de Administración Pública y Ciencia Política, perteneciente a la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Concepción.

El Dr. Cartes, quien el año pasado fuera candidato al Premio Nacional de Historia, está casado con la socióloga y profesora UdeC, Dra. Violeta Montero Barriga.

Además, también se desempeña en la Facultad de Humanidades y Arte. Reconoce que la UdeC “es un lugar cercano e importante en todas las etapas de mi vida. Crecí jugando allí, pues mi madre era profesora, pasé mi adolescencia andando en bicicleta; estudié Derecho y luego un postgrado, es la Universidad de mis padres, señora, suegros y hermanos. Para mí, la UdeC es un lugar de gran valor afectivo, espiritual, cultural y natural”, relata.

También cumpliendo 25 años de servicio está Jorge Rodrigo San Martin Montoya, administrador del Laboratorio de Computación del Departamento de Historia, quien es casado con Verónica y es papá de dos hijas.

San Martín ve con alegría y satisfacción estos 25 años, ya que siente que he desarrollado su actividad laboral con muchos desafíos, con variadas capacitaciones, terminando una carrera profesional, enfrentando retos que lo han hecho crecer en lo personal, profesional, laboral y familiar.

“En este tiempo en la Universidad he formado una familia, nacieron mis dos hijas, hoy adolescentes, he hecho grandes amigos y visto pasar a muchos y muchas jóvenes alumnos y alumnas, hoy profesionales. En gran medida, todo lo que soy se lo debo a la Universidad, lo veo reflejado en mí mismo, en mi familia, en el progreso de mis hijas. Agradezco el reconocimiento al esfuerzo y compromiso que he mantenido hasta ahora y quiero señalar que seguiré aportando y ofreciendo el máximo de mis capacidades y mi mayor empeño por los próximos años, con la certeza y convicción de contribuir con mi trabajo a la formación de nuevos y nuevas profesionales y al engrandecimiento de nuestra Universidad”, manifiesta.

30 años de trabajo

Rosina Cecilia Valdés Carrasco es Educadora de Párvulos egresada de la Universidad de Concepción. En el año 1991 ingresó como docente en el Departamento de Educación, Sede Los Ángeles.

Ya en el año 1995 asumió como Jefa de Carrera de Educación Parvularia, “cargo que desempeñé con mucho gusto y compromiso e ininterrumpidamente por más de 25 años”, detalla. Actualmente se desempeña como Secretaria Académica del Campus Los Ángeles, brindando apoyo a las distintas carreras de las dos Escuelas: Educación y Ciencias y Tecnología.

Su núcleo familiar está constituido por su esposo, compañero de vida por 30 años, los mismos que cumple en la institución, y tres hijos universitarios de esta misma casa de estudios, en las carreras de Geología, Medicina e Ingeniería.

Valdés expresa que “trabajar en la Universidad de Concepción es un compromiso, dedicación y fidelidad, donde coloco mis mejores esfuerzos y corazón día a día, una rica experiencia de vida que he intento transmitir a los(as) nuevos(as) colegas que tienen el privilegio de trabajar en esta gran Universidad”.

En tanto, la Dra. Soraya Elisa Gutiérrez Gallegos también cumple 30 años de servicio. Actualmente es Decana de la Facultad de Ciencias Biológicas. Realizó sus estudios de pregrado en la carrera de Bioquímica, posteriormente el magíster en la misma área y, con una beca UdeC, se trasladó a Estados Unidos a realizar su doctorado.

“La UdeC me ha dado la libertad de dedicarme a lo que me encanta, la investigación, la docencia y, más recientemente, a desarrollar habilidades en el área de gestión universitaria. Ha sido —y sigue siendo—un reto diario, una motivación, un objetivo por el que luchar, un lugar de progreso, donde todas y cada una de las personas que he conocido y sigo conociendo me enriquecen y ayudan a seguir creciendo. Estar en la UdeC hace realidad para mí la frase ‘escoge un trabajo que te haga feliz y no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida’”, señala.

Otro de los homenajeados es Benjamín Erwin Pino Merino, auxiliar del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Facultad de Ingeniería UdeC, cuyo grupo familiar se compone de su esposa Marcela y sus cuatro hijos, con quienes vive y han sido un pilar fundamental para él gracias a su apoyo y amor.

Cuenta que para él “la Universidad ha sido un lugar interesante y acogedor, ya que me ha permitido conocer grandes personas, variadas facultades y departamentos, los cuales me han dado proyección, estabilidad y progreso a lo largo de mis años. Asimismo, la UdeC ha logrado tener reconocimiento por la labor y apoyo de todas y todos los que la integramos, el cual ha sido fundamental para el crecimiento y desarrollo de la institución a nivel nacional e internacional. Agradecer por la oportunidad de formar parte de esta comunidad y cumplir un ciclo de mi vida laboral y familiar», sentencia.